IA en las aulas: una herramienta que potencia el aprendizaje y redefine el rol docente

En el marco del Foro Ciencia UDG 2025, el doctor Ramiro Israel Esparza Pérez, profesor investigador del Centro Universitario de Tlajomulco, impartió la ponencia “Inteligencia artificial en la docencia”, en la que reflexionó sobre el impacto acelerado que esta tecnología está generando en la formación académica.

El investigador recordó que, si bien la IA no es un concepto nuevo, su adopción reciente ha sido notablemente rápida, superando incluso la velocidad con la que se incorporaron tecnologías como el internet o los teléfonos inteligentes. Hoy, afirmó, la IA es capaz de memorizar información, escribir código, resolver ejercicios, realizar búsquedas complejas y generar contenido creativo en segundos, tareas que a una persona le tomarían horas.

Esparza Pérez enfatizó que la IA no debe concebirse únicamente como una amenaza, sino como una herramienta que puede potenciar el aprendizaje cuando se utiliza con metodología y fundamentos pedagógicos claros. 

Expuso una revisión sistemática de 41 estudios realizada entre 2022 y 2025, cuyos resultados muestran que, en contextos guiados, la IA mejora la percepción del aprendizaje, fortalece el razonamiento y promueve habilidades de pensamiento de orden superior.

Por ello, señaló que su integración en la docencia requiere sustentarse en teorías educativas como la taxonomía de Bloom, el modelo ADDIE o los marcos de diseño curricular de Kern, que permiten orientar la tecnología hacia objetivos formativos específicos.

El doctor Esparza destacó además el papel de la IA como tutor académico disponible 24/7, capaz de ofrecer retroalimentación inmediata y personalizada. Esta función, afirmó, es especialmente valiosa en grupos numerosos, donde el acompañamiento individual suele ser limitado. No obstante, advirtió que la educación no puede reducirse al consumo de

información.

“Información no es conocimiento”, subrayó al explicar que aprender implica estructurar ideas, practicar, equivocarse y recibir retroalimentación oportuna. También alertó sobre riesgos como la automatización del pensamiento, la dependencia excesiva, la pérdida de habilidades previamente adquiridas y el uso de la IA sin supervisión ni criterios pedagógicos.

Antes de concluir, invitó al profesorado a utilizar la inteligencia artificial de manera estratégica. Aseguró que, cuando se emplea correctamente, esta herramienta potencia las habilidades docentes y libera tiempo valioso para la atención personalizada del estudiantado.

Atentamente
“Piensa y Trabaja”
“1925-2025. Un Siglo de Pensar y Trabajar”
Guadalajara, Jalisco, 4 de diciembre de 2025

Texto: Vicerrectoría Adjunta Académica y de Investigación
Fotografía: Cortesía VAAI